viernes, 12 de diciembre de 2008

[En otras palabras] Cuando se ha puesto una vez el pie del otro lado...

Hay experiencias que te cambian para siempre, que dejan su rastro en todo lo que serás en adelante. Lo que a veces olvidamos es que también hay ideas, pensamientos, decisiones... que hacen que nunca vuelvas a ser el mismo, que te llevan a pisar al otro lado.

Cuando se ha puesto una vez el pie del otro lado
y se puede sin embargo volver,
ya nunca más se pisará como antes
y poco a poco se irá pisando de este lado el otro lado.

Es el aprendizaje
que después no se resigna
a que todo lo demás,
sobre todo el amor,
no haga lo mismo.

El otro lado es el mayor contagio.
Hasta los mismos ojos cambian de color
y adquieren el tono transparente de las fábulas.

Roberto Juarroz

5 comentarios:

Noemi Risco Mateo dijo...

Es cierto, hay momentos decisivos en tu vida que lo cambian todo. No me arrepiento de mis decisiones. La vida es como uno de aquellos libros de "Elige tu propia aventura" ;)
¡¡FELIZ NAVIDAD!!
Tanakil.

Juan A. dijo...

Qué lindo. Sí, hay experiencias definitivas que imprimen carácter.
Gracias por tus palabras, aquí y en mi casa.

Nieva a las puertas de Granada. Besos.

Sibila dijo...

A veces no te das cuenta hasta que pasa el tiempo, pero a veces puedes acariciar justo ese momento en que cruzas la línea y todo cambia para siempre. Da un poco de vértigo.

Nieve en Granada, qué belleza... aún recuerdo el día que me desperté y vi la nieve frente a mi ventana. Otro momento mágico. :D

Wuwei dijo...

La verdad es que cada pequeño momento te cambia y lo cambia todo a la vez. Hay momentos, sin embargo, en los que somos conscientes de cómo algo en nuestra vida (una decisión, un gesto, una palabra, una mirada...) ha hecho que toda tu trayectoria dé un giro inesperado. En mi caso fue un libro que alguien me regaló. Empezaba así:

"Cuando tengas que elegir entre dos caminos, pregúntate cuál de ellos tiene corazón.
Quien elige el camino del corazón
no se equivoca nunca"

En este mismo momento alguien tropieza al otro lado del mundo y cae al suelo; un ratón en la sabana africana se refugia en su madriguera justo a tiempo para salvar su vida; yo escribo estas líneas cuando debería (¿debería?) estar en otro sitio... y ya nunca nada será igual. Todo y todos estamos interconectados.
La Vida es una canción con variaciones sorprendentes, un Misterio arrebatador.

Un beso.

Sibila dijo...

Bienvenido, Wuwei, preciosa reflexión, gracias. Muy buena también la cita del libro. A veces el corazón nos lleva a caminos escabrosos, pero siempre nos deja donde nos toca estar. ;)

Un saludo.