Una luz para alumbrar el camino en la oscuridad y atisbar tras el velo en la noche de Samhain...
Necesité, eso sí, un poco de ayuda de unas manos más habilidosas que las mías, pero me gustó el resultado. A ver si el próximo año me atrevo con algo diferente.
4 comentarios:
No la había visto hasta ahora. ¡Qué sonrisa más amplia! :) La verdad es que cuesta lo suyo. Yo por poco me dejo las manos... ¡Uf!
Saludos,
Tanakil.
Es más duro de lo que parece, sí. Y pensar que hay gente que hace auténticas esculturas con esto... en fin, con los años iremos perfeccionando la técnica. :D
Es muy bonita :), cada año te saldrán mejor y mejor, y te atreverás a hacer caras con gestos y todo....jejeje, yo me he "enganchado" y me quedé con ganas de hacer más.
besitos
te he añadido a mis favoritos
Bienvenida, dama blanca.
Esta es sólo la segunda calabaza que hago, en realidad. Necesitaré más práctica, porque soy bastante torpe con las manualidades, pero la verdad es que es divertidísimo.
Me alegro de que te guste el blog, vuelve cuando quieras.
Un saludo.