viernes, 13 de noviembre de 2009

[En otras palabras] Convertir en sed nuestra tristeza

Aguantando, resistiendo, sosteniéndome firme contra el viento, contra el dolor, el propio y el ajeno. Aguardando el regreso de la luz, aunque su brillo me hiera y me ciegue. No me sentaré a llorar entre las ruinas mientras con las mismas piedras puedan levantarse edificios nuevos.

CONVERTIR EN SED NUESTRA TRISTEZA

A veces nos quedamos silenciosos
tan hondos y vacíos de tristeza,
que nuestra pura desnudez invoca
mudamente la luz de una presencia.

Medimos por el hueco, lo que falta
de densidad y plenitud en esta
lobreguez de ser hombre clausurado,
pero abierto en sí mismo y sin cancela.

Alguien a quien le damos nuestra espalda
nos acosa buscándonos las vueltas
y se pone a mirar hacia lo oscuro
que tiembla en lo interior de la caverna.

Y nosotros sentados hacia dentro,
con los ojos sellados en la piedra,
tememos que, al volvernos, de repente,
nos hallemos de cara a la evidencia.

Porque nunca podremos. Hace falta
que nos bielde la muerte y nos dé vuelta,
que nos meta su luz como en un guante
y nos saque los ojos hacia afuera.

La luz nos llegará. Se hará presente
a inaugurar su reino. Mientras llega,
sólo queda esperar en el silencio
y convertir en sed nuestra tristeza.

Jesús Tomé

2 comentarios:

rosavaotero@gmail.com dijo...

Hola, soy la editora de Jesús Tomé en Puerto Rico, gracias por dedicarle esta entrada. Te cuento que hay un blog sencillo, porque no soy experta en el ciberespacio, que abrí para él. Si quieres verlo, está en jesustome.blogspot.com
Allí coloco poemas suyos, etc. Pronto se publicará en PR, donde él reside, su poesía completa.
--Rosava.

Sibila dijo...

Muchísimas gracias a usted por comentar. La poesía de Tomé me resulta muy inspiradora, me alegro de saber que va a publicarse una recopilación, espero que llegue a España o pueda comprarse en formato electrónico para sus lectores de este lado del océano.
Gracias también por la dirección del blog, lo pongo entre los sitios que sigo.

Un saludo,
Sibila.